Una auditoría WiFi es un proceso de control y análisis de la red WiFi para garantizar que esta es segura y mantiene a sus usuarios protegidos ante posibles ataques o pérdida de calidad en sus conexiones. Estos procesos, también denominados auditorías wireless, tienen como objetivo mejorar la cibereguridad y maximizar la productividad en los equipos informáticos.
Con estos procesos, que deben repetirse de manera periódica, las redes WiFi se protegen de amenazas externas y mejoran sus potencialidades. Su dinámica es similar a la de cualquier auditoría, pues consiste en testar el nivel de calidad de la red y observar cuáles son los puntos débiles para mejorar la conexión y que esto se traduzca en más productividad, comunicaciones blindadas y menores riesgos.
¿Cómo funcionan las auditorías WiFi?
Una auditoría wifi puede ser interna o externa, aunque su funcionamiento es siempre similar. Las externas son más confiables pues quien las lleva a cabo es una empresa o agencia externa que nada tiene que ver con la organización de la empresa auditada.
En estos procesos, lo que se hace es detectar las vulnerabilidades y los protocolos de seguridad que tienen las empresas en sus redes WiFi y proponer soluciones para blindar las conexiones y mejorar la comunicación.
A día de hoy, cualquier empresa cuenta con una red WiFi propia a través de la cual se lanzan todas las comunicaciones. Esta red ha de estar debidamente protegida y ahí la seguridad informática juega un papel clave. Existen diferentes niveles de cifrado y a mayor complejidad, más seguridad en las conexiones.
El primer nivel es la propia ausencia de cifrado mediante contraseñas. Se trata de redes WiFi abiertas que permiten que cualquier usuario se conecte a ellas. Son propias de redes públicas, pero no son nada seguras, hasta el punto de que si es necesario hacer una consulta a través de internet un tanto personal, lo recomendable es acudir a redes cifradas.
El cifrado WEP es un sistema antiguo que ya no es recomendable porque es frágil ante determinados ataques cibernéticos. En cualquier caso, todavía muchas organizaciones optan por esta opción y es en las auditorías cuando se alerta de la necesidad de mejorar.
Más avanzados son los cifrados WPA y WPA2, que son sistemas de claves mediante los cuales se crean contraseñas privadas para impedir la conexión de personal ajeno a la organización.
Qué información se obtiene de una auditoría WiFi
El proceso de auditoría WiFi lo que hace realmente es testar la calidad de la conexión, ver sus debilidades y los puntos más vulnerables ante posibles ataques cibernéticos. Se trata de una solución de seguridad y de conectividad. No solo consiste en ver si la calidad de la conexión es buena, sino de comprobar si el sistema está lo suficientemente protegido.
En muchos sectores de actividad, como el turismo, la restauración o la hostelería, comprobar estos aspectos es fundamental para garantizar un buen servicio al cliente. Un auditori WiFi permite conocer las conexiones entrantes y salientes y con esta información se puede saber cuántos dispositivos y equipos hay conectados.
A nivel doméstico también se pueden ejecutar auditorías, mediante aplicaciones, para evitar las clásicas situaciones de gorrones usando WiFi de manera fraudulenta. Sin embargo, el mayor uso de estas auditorías es profesional.
Los hoteles y la conexión WiFi
Así, auditar la wifi de un hotel es fundamental para garantizar la conexión y la prestación de un buen servicio a los clientes. La importancia de la seguridad de la red WiFi en los hoteles es clave, porque son muchos los clientes que aprovechan este servicio para informarse sobre lugares que visitar o las actividades a realizar. Si la conexión no es segura o es insuficiente, esto se traduce en un menor grado de satisfacción.
En las auditorías de este tipo se valida la calidad de la señal, la potencia y la cobertura. Es habitual que en hoteles, en empresas o en centros de trabajo, la red WiFi no llegue por igual a todos los lugares. En el proceso que tiene por objetivo mejorar las redes de comunicación, uno de los aspectos más reseñables es la elaboración de mapas de calor y rangos que muestran claramente hasta dónde llega la señal y en qué condiciones.
Con esa información, la empresa puede ponerse manos a la obra para mejorar la conexión y garantizar la seguridad de la misma. En el caso de los hoteles esto se vuelve imprescindible porque la conexión WiFi es una de las cuestiones que más valoran los clientes durante su estancia.
Como vemos, la calidad de la conexión es importante, pero es más importante aún la seguridad de la WiFi, pues ser vulnerable a ataques cibernéticos pone en riesgo todos los datos personales de los clientes alojados en el hotel o de los trabajadores de determinada empresa y la propia información de los centros de trabajo. Los datos son el nuevo maná en informática y garantizar la privacidad es imprescindible.